Besos para ellos, mi más sincero afecto.
Me sonrió el aparcacoches
a la entrada del hotel
dentro había un lago
dentro del lago sentí mirarnos
Y era una barca
su mirada en la mía
o un café caro dejado en la mesa
o patos contratados
Me miró y sentí otra vez
que no era ese mi sitio
de gente podrida de dinero
y de tirar de un uso las toallas del lavabo
Y él sabía que no era mi sitio
y me sonrió casi enamorado
como yo
Tenía granos en la cara
y una pajarita atada
a su cuello falso
(en el verdadero
yo le besaba en el lago)
Marz
1 comentario:
Qué bonito.
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